Crowdfunding renovables
El crowdfunding energético o en renovables es la inversión colectiva en proyectos de energías renovables. Normalmente, se realiza a través de plataformas digitales. En la actualidad este tipo de inversión genera rendimientos muy interesantes para inversores largoplacistas y tradicionales.
Es muy fácil de invertir en energías renovables a través del crowdfunding, principalmente porque elimina la barrera de entrada que supondría invertir de forma individual (mínimo 100.000 euros).
La figura jurídica tradicional de las empresas que hacen crowdfunding es de plataforma de inversión participativa, por lo que inviertes de forma directa en los proyectos y además eres una especie de “accionista”. Algo que dificulta realizar ventas de tus participaciones, ya que requiere de burocracia a nivel administrativo y notarial.
Esto no sucede en el caso de invertir con Crowmie (te lo explico más abajo), porque su figura jurídica es de cuentas en participación con representaciones digitales. Así, puedes vender cuando quieras y en un clic en la plataforma.
Además de crowdfunding, se puede invertir en crowdlending en renovables. Esto es a través de un préstamo, que te devuelve un porcentaje de interés más lo principal. Tiene lugar sobre todo en autoconsumo industrial. Los inversores pagan la instalación y la empresa devuelve ese préstamo en x años, con pagos mensuales en los que se incluye el principal y los intereses.
¿Qué es el crowdfunding en renovables?
Una forma de inversión participativa.
Se realiza a través de plataformas digitales.
Bajo desembolso de capital con Crowmie
Puedes diversificar con el crowdfunding energético
Reduces el riesgo por la diversificación.
Eliges el tipo de proyecto energético que más te guste
Otras opciones con la tokenización de activos con Crowmie.
Crowdlending renovables
El crowdlending en renovables, como expliqué en el apartado anterior, se basa en la inversión colectiva en proyectos de energías renovables. Pero se diferencia del crowdfunding en que las rentabilidades provienen del préstamo y los intereses que te genera. En el crowdfunding eres dueño de una parte de esa instalación junto a otros inversores, en el crowdlending no (o no habitualmente).
Crowdfunding y crowdlending placas solares
De entre las energías renovables que son objeto de financiación colectiva, sobresalen las instalaciones de parques solares. Tanto crowdfunding, como crowdlending, es la favorita por cuestiones económicas. Los proyectos pueden tener una valor desde los 100.000 hasta millones de euros, por lo que las empresas pueden proponer a los inversores diferentes tipos de proyectos en cuanto a rentabilidad.
Normalmente cada plataforma se centra en un tipo de financiación, aunque otras como Crowmie no quiere cerrar puertas a sus inversores y darán acceso a todo tipo de inversión colectiva en renovables.
Crowmie
En una plataforma de inversión colectiva en energías renovables, actúa como un fondo y la figura jurídica de los contratos con los inversores es de cuentas en participación. Esto permite que tengas tus participaciones en formato digital, evitas la burocracia y puedes acceder a la inversión desde cualquier parte del mundo.
La media de rentabilidad se sitúa en un 8% anual y los tipos de proyectos son variados, tanto lending, como inversión para construir proyectos.
Crowmie actúa como un fondo, así los inversores no se tienen que preocupar de gestionar. La cantidad mínima de inversión es de 100 euros y los beneficios son rentas mensuales que provienen de la generación de la energía y participaciones que puedes vender a otro inversor en cualquier momento.
Tiene una buena comunidad de inversores que hablan a menudo en su grupo oficial de Telegram.
Conclusiones
El crowdfunding y el crowdlending energético son dos formas de invertir de forma colectiva en energías renovables. Un sector que está a salvo de inflación y de tipos de interés. La rentabilidad con respecto al riesgo las hace dos opciones tangibles para inversores tradicionales que buscan un riesgo y rentabilidad moderado.