¿Qué son las cuentas ómnibus?
Las cuentas ómnibus se utilizan en brókeres para comprar acciones. Con este tipo de cuentas tú no eres el dueño de la acción, sino que lo es el bróker, y a través de su gestión interna saben cuátas acciones te pertenecen a título figurativo, pero no nominativo.
Esto es algo que no se dice y muchas personas invierten a través de los brókeres online. Todo va bien hasta que hay problemas y es un peligro que muchos no saben. La mayoría de cuentas ómnibus tienen un límite de garantía de 200.000 euros o menos. Por lo tanto, si por cualquier razón el bróker cierra o desaparece, el fondo de garantía solo son 200.000 euros como máximo (tampoco quiere decir que vayas a recuperar el 100% de lo perdido si la cuantía es inferior).
Así, si tienes 350.000 euros invertido en acciones, lo máximo que recuperarías sería 200.000 euros. Y depende de cómo se haga la distribución de los fondos de garantía podrás o no recuperar.
Pero como todo, nada es blanco o negro. Hay que hablar de algunos matices como el derecho de separación del bróker en el caso de quiebra.
Cuenta ómnibus
Las cuentas ómnibus son cuentas donde se concentran todas las acciones que “pertenecen” a los inversores, pero que están a título nominativo a nombre del bróker. Esto se hace para facilitar toda la gestión de compra de acciones y burocracia. Algo que hoy en día se solucionaría con la tecnología blockchain (que nada tiene que ver con criptomonedas, en este aspecto).
Riesgos asociados a las cuentas ómnibus
¿Qué sucede si el bróker quiebra? Pues tendríamos dos situaciones. La menos mala es que si solo quiebra el bróker y no el banco depositario, el valor de tus acciones sigue siendo el mismo. En ese caso solo debes ejercer tu derecho de separación para que las acciones sean tuyas a título nominativo. Debes hacerte cargo de todo a nivel burocrático, abogados y notario.
En el peor de los casos, si también quiebra el banco custodio, habrás perdido todo salvo lo que te cubra el Fondo de Garantía de Inversiones. Esto depende de cada banco y bróker, por lo que analiza dicha cuestión si vas a invertir más de 50.000 euros (a lo largo de tu trayectoria como inversor). Normalmente, el fondo cubre entre 100.000 y 200.000 euros.
La seguridad de las cuentas ómnibus
En general, como los bancos y brókeres tienen que cumplir de forma estricta con muchos requerimientos legales, la probabilidad de que algo así suceda es baja (aunque ya ha habido casos).
Otro problema de las cuentas ómnibus es que no son transparentes con cómo se gestionan. Esto puede generar inseguridad a los inversores. Una mala gestión puede hacer que pierdas la inversión que has realizado. Aunque esto último hoy en día se gestiona de forma digital.
Hoy en día todo esto se puede evitar con la blockchain. No te asustes porque blockchain no es igual a criptomoneda. La tecnología como tal tiene muchos usos y solucionan problemas como este, sobre todo la transparencia.
Blockchain
La tecnología blockchain aporta mucho valor a las inversiones, pues en el caso de los STO son seguros a nivel jurídico y además solucionan problemas de las inversiones tradicionales.
¿Un ejemplo? Si en algún momento has querido invertir para obtener ingresos pasivos, conocerás una de las inversiones más famosas, la inversión directa en renovables. Aportan más rentabilidad que los dividendos y el reparto de los beneficios es mensual (algo que agradecen los inversores).
Esto además, permite que el desembolso inicial de la inversión sea bajo (100 euros) y que se pueda hacer todo de forma digital. Y todo esto de forma transparente, pues se utiliza la tecnología blockchain y smart contracts. Así, el inversor tiene un mayor control sobre la inversión.
Para invertir en este tipo de proyectos puedes acceder a Crowmie, una empresa supervisada por una ESI que está autorizada por la CNMV.
La inversión con STO vs cuentas ómnibus
Los STO o security token es la representación digital de un activo financiero. Esos activos tienen ya ua regulación propia, por lo que, la seguridad para inversor es máxima. Por ejemplo, préstamos participativos o cuentas en participación, son dos figuras jurídicas muy tuilizadas en la inversión con STO. Aunque también que está pasando a STO fondos de inversión como hizo Renta4 ( a este proceso se le llama tokenización).
Este tipo de tokenización es aplicable a todos los activos financieros. En el caso de Crowmie, puedes encontrar tanto proyectos con préstamos participativos, como con cuentas en participación. Ambas formas reguladas en el ordenamiento jurídico. Además, de la entrega del correspondiente contrato, para la tranquilidad del inversor (smart contract y contrato en pdf).
Eliminar todo los negativo de las cuentas ómnibus es fácil con la tecnología blockchain. Prioriza la seguridad de tu inversión, elige bien un bróker o invierte de forma directa con tecnología.
En definitiva, los grandes inversores ya se han dado cuenta del valor que tiene tokenizar inversiones a través de STO.
Conclusiones
Las cuentas ómnibus representan un riesgo para la inversión que pocos usuarios conocen. Es importante saber qué hace el bróker con nuestras compras, actualmente, se podría mejorar en este aspecto con el uso de tecnología blockchain. Aunque ya hay grandes entidades que han empezado a ver los beneficios, aún queda mucho por delante.
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